La reina Isabel II se deja ver por primera vez tras los festejos del Jubileo de Platino que festejaron sus 70 años como monarca del Reino Unido, pero a pesar de su actitud sonriente, ya se le nota el cansancio por sus 96 años de edad.
Ayer 21 de junio, Isabel II recibió en el castillo de Windsor, su residencia actual, al arzobispo de Canterbury, Justin Welby. La monarca apareció en actitud muy sonriente para recibir la Cruz de Canterbury.
El prelado le otorgó este reconocimiento como señal de agradecimiento por su “espléndido servicio” durante 70 años a la Iglesia Anglicana, misma que ella encabeza. Además, también le entregó un manuscrito en el que destaca su dedicación tanto para mantener la unión de su pueblo como para procurar el bienestar de los menos afortunados.
La reaparición de la reina Isabel II tras Jubileo desata nueva preocupación por su salud
A pesar de que la monarca se dejó ver con buen ánimo ante el arzobispo de Canterbury y que no se apoyó en el bastón que últimamente usa debido a sus problemas de movilidad, se le vio muy delgada y con aspecto pálido.
Es evidente que su salud está en deterioro. Un detalle muy revelador es que, en sus últimas apariciones en público, puede verse que la reina utiliza un mismo par de zapatos tipo mocasín negros, de charol y con un tacón mínimo. Quizá la razón sea que son los únicos que la ayudan a sentirse cómoda y segura para caminar. Esperemos que la monarca se recupere durante sus tradicionales vacaciones de verano en su residencia de Balmoral, en Escocia.
¿Qué es la Cruz de Canterbury?
La Cruz de Canterbury es una pequeña insignia hecha de plata que se entrega anualmente como parte de los Premios Lambeth a un pequeño grupo de personas que hayan demostrado prestar un servicio excepcional a la iglesia.
Su diseño está inspirado en un broche sajón encontrado en Canterbury en el año de 1867, pero que data de alrededor de 850 D.C. Incluye un nudo con tres esquinas que simbolizan la trinidad cristiana. Este reconocimiento generalmente se otorga a personalidades que han contribuido a difundir la educación religiosa o a mediar y mejorar las relaciones entre religiones.
La salud de la reina Isabel II continúa limitando sus apariciones en compromisos públicos
Recordemos que, durante los festejos recientes del Jubileo de Platino, la monarca únicamente pudo estar presente en dos ocasiones en el balcón del palacio de Buckingham: en la ceremonia de Trooping the Colour y en el cierre de las celebraciones. Además de lo anterior, solo apareció para encender el “Árbol de árboles”, con el que se le rindió homenaje por sus 70 años de servicio a la corona. Fuera de esto, sus problemas de movilidad no le permitieron asistir a ningún otro de los eventos organizados en su honor.
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