En El Mundo de Regina abrazamos el término ageless de una manera muy especial y aplaudimos que Charlize Theron sea parte de ello. En estas épocas de transformaciones de cara, cirugías mal aplicadas, rellenos innecesarios y un sinfín de tratamientos estéticos que hacen que las famosas se vean mal, la actriz hollywoodense da una cátedra de lo que significa abrazar el paso del tiempo con dignidad y aceptación.
Charlize Theron, de 48 años, sencillamente luce perfecta tal como es. ¿¡Cuándo se ha visto mal?! La actriz lleva 20 años siendo imagen de Dior y en particular del clásico perfume J’Adore. Y ahora, cuando la marca francesa relanzará la reinvención de L’Or bajo el mismo concepto de J’Adore, Charlize hizo un recuento de cómo ha vivido estas dos décadas para la firma durante una charla con la revista Allure. “Estoy increíblemente agradecida por ello y muy orgullosa. En esta campaña se ha entretejido mi vida durante los últimos 20 años y esto es sumamente especial”, expresó emocionada durante la charla.


El paso del tiempo, un proceso natural para Charlize Theron
Simplemente, Charlize Theron es una muestra de que lo de hoy es lucir al natural aun cuando sienta que ‘avergüenza’ a sus hijas Jackson y August, de 11 y 8 años, respectivamente. Y es que para ellas, el hecho de ver a su mamá en un espectacular de más de dos metros de alto, con poca (o sin) ropa y como único accesorio la fragancia de Dior, no ha sido fácil de procesar. Para la actriz el proceso de envejecimiento es digno de admirarse y como tal, ella no se lo cuestiona. Con orgullo y cuando recibe algún comentario sobre su aspecto, responde de manera inmediata.
“Mi cara está cambiando y me encanta que así sea. Sobre todo porque está envejeciendo! La gente piensa que me hice una cirugía estética o algún tratamiento facial y se preguntan: ‘¿Qué se hizo en la cara?’. Pero respondo: ‘¡B**ch, estoy envejeciendo! Y no me sometí a una ‘mala cirugía'”.


Sin duda, Theron pone sobre la mesa este afán de señalar el físico de las mujeres que van envejeciendo. Y es que la actriz asegura que no es el caso de los hombres.
“Desprecio ese concepto y quiero luchar contra él. Creo también que las mujeres quieren envejecer de una manera que consideren correcta. Me parece que tenemos que ser un poco más empáticos con la forma en que todos pasamos por ‘nuestro viaje’ por el tiempo. Ahora, ver mi cara en un cartel es basante divertido”.
La edad es un número y algo inevitable
Y, ¡vaya que Charlize se divierte! En la pantalla grande ha interpretado papeles completamente distintos y que le han valido el reconocimiento de la industria. Pero ahora está más consciente que nunca, de que el paso del tiempo sí ha provocado un cambio importante en su físico.
“Nunca volveré a hacer una película en la que debo subir 20 kilos porque ya no puedes quitártelo tan fácil. Cuando tenía 27 años hice Monster. Bajé 15 kilos de la noche a la mañana y me recuperé en poco tiempo. Tully la filmé cuando tenía 43 y recuerdo que un año después de tratar de bajar de peso, llamé a mi médico y le decía: ‘Creo que me estoy muriendo porque no puedo bajar’. Él me dijo: ‘Tienes máss de 40 años. Tu metabolismo no es lo que era. Nadie quiere escuchar eso”.
Sin embargo, le resulta divertido hacer ‘sufrir’ a su stylist cuando tiene ‘kilitos’ de más y acude a una alfombra roja. “Siempre logra que me vea bien”, confesó la actriz. El único cambio que realmente lamenta ahora que es una mujer más madura es su agilidad.
“Lo que realmente me molesta es que ahora hago películas de acción y si me hago daño, tardo mucho más en sanar que cuando tenía 20. Más que mi cara, desearía tener cuerpo de 25 años, poder lanzarme contra la pared y ni siquiera lastimarme. Ahora, si no hago ejercicio durante tres días, no puedo caminar ni sentarme en el inodoro”.
Charlize: un ejemplo de belleza
No cabe duda que Charlize Theron ha aprendido a verse tan real como es posible y abraza el paso del tiempo como una verdadera mujer muy segura de sí misma. Y justo ese es el ejemplo que quiere darle a sus hijas. “Ellas no tienen idea cómo es la edad. Ven a alguien y solo admiran su belleza sin importar si tiene 20 o 60 años. Ojalá pudiéramos mantener eso”, explicó a la revista.
Ejemplos en Hollywood y en el mundo del entretenimiento tenemos suficientes. Quizá el último más sonado fue el caso de Madonna, quien fue víctima de una bacteria que pudo originarse por un peligroso tratamiento estético. En su afán por verse todavía más joven y estar a la par de las nuevas generaciones, casi muere. En su momento, también vimos la cara de Courteney Cox o Nicole Kidman casi sin expresión por exceso de botox. Si, quizá un relleno ayude a verte mejor pero bien explican los expertos que la vanidad se convierte en una obsesión. La protagonista de Friends admitió que al verse tan deforme, se arrepintió de hacerlo.
No podemos dejar de lado a Kylie Jenner, quien a pesar de negarlo por años y su cambio físico era más que evidente, hace un par de semanas admitió las cirugías estéticas a las que se sometió antes de los 21 años. Ahora como mamá de Stormi, de cinco años, no se imagina cómo ‘podría evitar’ que ella pasara por lo mismo a tan temprana edad. Ojalá la mayoría pensara y actuara como Charlize Theron y realmente pudieran admirar su belleza y abrazar el paso del tiempo como lo que es… un resumen de una vida llena de aventuras, experiencias y sabiduría.