El viaje al Caribe de William y Kate era uno de los eventos más esperados en este año. Con motivo del Jubileo de Platino de la reina Isabel II, los miembros de la realeza deberán cumplir con ciertos compromisos en nombre de su majestad. Pero sin duda, la visita y el viaje más esperado era el de los duques de Cambridge a Belice, que se llevó a cabo este fin de semana. Hace más de dos años que no realizaban un viaje de tal magnitud y después de tanto planearlo, su visita no inició como se esperaba.
El diario británico Daily Mail hizo público el primer gran cambio en la agenda de William y Kate. Los duques tenían previsto visitar Belice, Jamaica y Bahamas, pero su primer gran compromiso fue modificado por protestas en su contra. El primer destino sería Belice y su primer visita era la granja de cacao en la finca Akte’iL Ha, un lugar ubicado en las faldas de las montañas mayas que representa un ejemplo de agricultura sostenible.
El gran rechazo a los duques de Cambridge
El lugar es conocido como pueblo de Indian Creek que lleva tiempo en disputa con la organización benéfica Fauna and Flora International por una propiedad contigua. El problema es que el príncipe William es patrocinador de esta organización desde 2020, un hecho que provocó la molestia entre sus habitantes al saber que los duques de Cambridge no tomarán en cuenta la situación.
Los aldeanos de Indian Creek organizaron una protesta calificando la visita como ‘colonialismo’ y como una ‘bofetada en la cara’ de parte de los duques. Por dicha razón, el Palacio de Kensington modificó la agenda de William y Kate para evitar una trifulca mayor. Sebastian Shol, presidente del pueblo de Indian Creek, no titubeó al enviar un mensaje directo a los duques de Cambridge.
“No queremos que aterricen en nuestra tierra. Ese es el mensaje que queremos enviar. Podrían aterrizar en cualquier lugar, pero no en nuestra tierra”



El presidente del pueblo alegó que ‘se les ordenó’ dejarles usar el campo de futbol y verse bien frente a personas importantes que llegarían de visita. Al enterarse de que se trataba del príncipe William la gente protestó de inmediato. “Son personas de alto perfil, las respetamos, pero también tienen que respetar a los líderes de la comunidad”, alegó el alcalde.
Este inconveniente modificó los planes iniciales de William y Kate, quienes abandonaron el Reino Unido horas más tarde de lo previsto. Para tratar de ‘darle la vuelta a la controversia’, el gobierno de Belice tuvo que rendir una declaración pública que el Daily Mail replicó en sus páginas. “Debido a problemas en este pueblo, el gobierno de Belice activó su planificación de contingencia y se seleccionó otro lugar para mostrar el espíritu empresarial de la comunidad maya en la industria del cacao”, aseguró en su comunicado oficial.
La primera (y dulce) visita de William y Kate
Con su mejor cara, los duques de Cambridge llegaron a la granja Che’il de Hopkins, un gran ejemplo de producción y agricultura sostenible. Además, un lugar en el que la elaboración del tradicional chocolate maya es un ejemplo.
Ahí, William y Kate disfrutaron toda una cátedra de los lugareños, quienes los recibieron cariñosamente antes de mostrarles sus más grandes secretos. Los duques tuvieron oportunidad de ver de cerca cómo la gente recoge el fruto de la planta y cómo se inicia la preparación de esta delicia.
La pareja se mostró de lo más accesible pues además de realizar una larga caminata, se sentaron sobre dos troncos para escuchar atentos las explicaciones de los responsables del lugar. Haciendo honor a la sencillez que los caracteriza, William y Kate degustaron las semillas de cacao que les dieron a probar, al tiempo que hacían preguntas a los empleados de la granja sobre sus funciones mientras éstos molían granos de cacao.
El baile, su secreto ‘mejor guardado’
Como era de esperarse, los habitantes de la isla debían recibir a William y Kate de la mejor manera con una celebración digna de la realeza. Y es que era importante demostrar la unidad que todavía existe entre ambas naciones.
Ante tal alegría de parte de los isleños, William no pudo rechazar la invitación a bailar por parte de ‘Mamá G’. Sin pensarlo demasiado, el príncipe demostró que sabe bailar muy bien pues hizo gala de su gran ritmo a los ahí presentes.
Ni el príncipe ni Kate pudieron resistirse al encanto de la música y la alegría de los habitantes del lugar. Esta imagen ha dado la vuelta al mundo pues son contadas las veces en las que vemos al príncipe tan relajado. Los duques de Cambridge están compartiendo todos los detalles de su visita en sus redes sociales. Así que seguramente en los próximos días tendremos mucho más de este gran primer viaje post pandemia de William y Kate por el Caribe.
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