El comentario racista, que supuestamente se hizo en la familia real inglesa acerca del color de piel del primogénito de Meghan y Harry, ha sido definitivamente uno de los temas más fuertes que se tocaron en la entrevista de Oprah Winfrey.
Con la llegada de Meghan Markle a la realeza inglesa, parecía que la reina Isabel II había dejado atrás sus juicios. La realeza intransigible parecía haberse doblado. Sin embargo, después de todo lo sucedido a partir del Megxit, ha puesto a tambalear nuevamente a la monarquía. Situación que no sucedía desde Diana de Gales.
Regresando a aquella entrevista que fue una bomba de la que todavía quedan estragos, parece que ya se resolvió el tema del racismo. Puede ser que de alguna manera se resolvieran muchas dudas a partir de aquellas declaraciones de los duques de Sussex, pero lo cierto, es que surgieron 10,000 preguntas más.
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Una de ellas era sobre quién había sido el integrante de la familia que había hecho el comentario racista sobre Archie Harrison Mountbatten-Windsor, primogénito del príncipe Harry y séptimo en línea de sucesión al trono.
¿Quién descubrió al “culpable” del comentario racista? Lady Collin Campbell
Lady Collin es una socialité experta en la monarquía inglesa y fue ella quien aseguró que la princesa Anne fue la responsable del desafortunado comentario. Lady C, como es conocida, sí es de “sangre azul” pues está casada con un Lord y tiene ciertos accesos a fuentes fidedignas de información. Ella ha escrito ocho libros sobre la monarquía inglesa y fue la primera en decir que la princesa Diana estaba enferma de bulimia. Asimismo, tiene un podcast llamado “Platicando con lady C”.
Con lo anterior aclarado, parece que cuando Lady C dice algo, es verdad. Ella aclaró que la hermana del príncipe Carlos fue la responsable del comentario, pero que fue un desafortunado malentendido. Anne no hizo referencia al color de piel de Archie, sino mostró su preocupación por la llegada Meghan Markle a la familia.
“No hubo preocupaciones sobre el color de Meghan. A la princesa Anne le preocupaba, y con razón, que si el matrimonio continuaba y había niños habría grandes problemas. No por el color de Meghan, sino por la incapacidad y determinación de ésta de seguir sin poder apreciar las diferencias culturales. A Anne le preocupaba que Meghan realmente no respetara a la institución con la que estaba por casarse y a la familia a la que estaba entrando”, comentó Lady Collin.
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Además, agregó que William y Anne fueron los que más le advirtieron a Harry sobre Meghan, pues ellos decían que no era la mujer ideal para lidiar con la responsabilidad de ser miembro de su familia.
