Constancia, disciplina y pasión… Esas tres características o cualidades podrían definir a la perfección a este gran y exitoso personaje: Fernando Stovell. Un chef que ‘madruga’ sin chistar, se emociona al crear un menú, sobresale del resto, se preocupa (y se ocupa) por su equipo y presume con orgullo sus raíces mexicanas en cualquier parte del mundo… especialmente en Inglaterra.
El chef Fernando Stovell se ha hecho de un nombre a base de esfuerzo y enorme pasión por la cocina desde que tenía 15 años. A esa edad ayudaba a su madre, de origen inglés, que trabajaba en la embajada británica. Su padre era mexicano y siempre pensó que su hijo sería piloto. Y es que a ‘escondidas’ logró viajar a Londres para estudiar en el Westminster College y convertirse en chef profesional; después, ya con el título en la mano regresó a México para ‘presumirlo a sus padres’.
En entrevista exclusiva para El Mundo de Regina, Fernando Stovell confesó que fue gracias a sus talentos y habilidades que trabajó en los mejores restaurantes londinenses. The Capital en Londres y Le Cinq en París son tan solo un par de lugares con estrellas Michelin en los que el chef mexicano pudo colaborar, foguearse y así, explotar su talento. “En cuanto empecé a poner mis manos en la mesa y pude concentrarme en mis ingredientes para poderlos cocinar de la mejor manera, todo fluyó de manera increíble”, confesó emocionado.
‘El mejor de su clase’
Stovell pasó casi cuatro años trabajando sin paga en Londres. “Trabajar en esos lugares es complejo. Es un empleo muy peleado porque son miles de cocineros que darían todo por estar ahí y yo fui de los afortunados”, reveló Fernando. Y es que el chef mexicano se graduó con honores y eso le abrió las puertas para trabajar en Europa. “Me metía a concursos de cocina y casi todos los ganaba. Los maestros comenzaron a fijarse en mí y me alentaban a ser mejor cada día”, explicó en la entrevista.
Y fue precisamente en una de esas oportunidades que su talento llegó a lugares que jamás imaginó. “En un verano convocaron a los mejores 10 estudiantes de toda la escuela. Querían que trabajáramos para alguien muy importante y se nos prohibía preguntar quién era esa persona. Nos dijeron que cocinaríamos como 20 horas diarias durante tres meses sin días de vacaciones”, relató Fernando.
‘Un golpe de suerte’ más que merecido
Al pasar de los días, Fernando Stovell se enteró que se trataba de un importante jefe de estado de Medio Oriente. Fue entonces cuando comenzó su carrera como toda una celebridad sin casi notarlo. “Curiosamente, los cocineros con los que yo entrenaba y hasta las personas a quienes yo entreno hoy en día, todos quieren ser una celebridad de manera inmediata y eso no pasa a menudo. ¡Pasa de churro!”, compartió a manera de broma tratando de que el mensaje para todos aquellos estudiantes de cocina tomen muy en serio su carrera.
Si algo salta a la vista al platicar con Fernando es su sencillez. Es un hombre humilde que jamás deja a su equipo de lado. Sabe y reconoce el esfuerzo de su gente porque además, tiene un equipo que hoy en día se encarga de su restaurante ‘Stovells’ cuando él no está. Consciente siempre de que el éxito así como llega puede esfumarse, Fernando nunca baja la guardia. “El éxito de un chef es la constancia y nunca bajar la guardia. El hecho de tratar de hacer las cosas lo mejor que puedo, porque soy humano y puedo cometer errores, pero hay momentos que se cruzan en tu vida como lo fue en aquel verano que les platicaba”, explicó.
El gran descubrimiento de Isabel II: la cocina de Fernando Stovell
A los 23 años se convirtió en chef ejecutivo europeo por su talento natural y prácticamente nato. Por si fuera poco, Fernando Stovell demostró en aquella ocasión que tenía perfecto conocimiento del francés, alemán y un perfecto inglés. “Me pidieron la traducción de varios menús en estos idiomas. Eran como 15 o 20 y estaban firmados en rojo; en ese momento me di cuenta que eran para alguien muy importante”, relató. “Me eligieron porque era muy buen cocinero y de pronto ya preparaba canapés para su majestad, la reina Isabel II“, presumió orgulloso.
De los 40 cocineros involucrados en este ‘proyecto’, solo había cuatro para los eventos privados y el talento de Fernando Stovell lo puso al frente de todos. “Tuve la fortuna y el privilegio de cocinarle a la reina, al príncipe Carlos y a varios miembros de la realeza. Como la comida que preparé tuvo comentarios muy positivos y sigo siendo el chef ejecutivo de este jefe de estado del Medio Oriente”.
Pero como era de esperarse, la monarca no se quedó con las ganas del ‘sabor’ tan peculiar de la comida de Fernando. “En 2010, fui el encargado de cocinarle desayuno, comida, cena y hasta la hora del té a su majestad durante su estancia en todos los países del Medio Oriente. Diseñaba los banquetes para todos los cocineros; estuve a cargo de la mesa principal y tenía que estar atento a todo. Fue una cosa muy emotiva e impresionante para mí”, compartió el chef.
‘Stovells’, un pedacito de México en Inglaterra
Y Fernando Stovell habla de esto como una experiencia inolvidable pero más allá de esto, el chef mexicano puede presumir de su enorme seriedad a la hora de cocinar. “Ser serio y profesional te lleva a lugares inimaginables”, reiteró el experto en la cocina que despierta a diario a las tres de la mañana. ¿La razón? La responsabilidad de estar al frente de un restaurante en el pequeño pueblo de Surrey y además, estar de visita en México, en donde tiene planes de abrir un restaurante. “Estamos en pláticas y espero que sea pronto”, confesó.
Hace 10 años abrió su negocio propio en Surrey, Inglaterra. Sin perder el piso, Fernando sabe que este logro no es más que producto del respeto a su trabajo y el de su equipo.
“Hay que tener los pies en la tierra porque el que está cocinando o limpiando o trabajando no es más que el otro. Todos somos iguales en un restaurante y no porque entre una celebridad o porque yo haya tenido la oportunidad de cocinarle a un miembro de la realeza soy más importante que alguno de ellos”
Quizá de ahí, sus cualidades como ser humano y su talento en la cocina hayan logrado que se corriera la voz entre las celebridades que visitan Inglaterra y que a su vez, llegan hasta su restaurante. Entre los famosos que encontramos en su lista de comensales están: Axel Rose, Mick Jagger, U2, Green Day, Orlando Bloom, Steven Spielberg, Los Beckham, Michael Schumacher, entre muchos más.
Su restaurante tiene ya una larga lista de reconocimientos y premios por su exquisitez en los platillos tan originales y con un toque muy especial que cambian de acuerdo a la estación. “Me encanta sacarle provecho a los productos locales y de temporada tanto de Gran Bretaña como de Centro y Sudamérica”. Por si fuera poco, Fernando Stovell parece que cocina ‘por instinto e intuición’. Es gran aficionado a la cocina con madera; la leña es su herramienta más valiosa para la cocción de sus platillos. No hay nada que disfrute más que cocinar en una parrilla con maderas de árboles frutales. De ahí que ‘Stovells’ tenga una mezcla de sabores mexicanos fusionados a la perfección con la cocina europea.
El éxito continúa… ¡y se trabaja!
Para Fernando Stovell parece no haber límites, sino experiencias que sumar y seguir compartiendo con las siguientes generaciones. El chef mexicano sabe mejor que nadie que se logra subir a base de esfuerzo y constancia. Hoy en México se reconoce su talento y es el más feliz de haber participado en MasterChef México para Televisión Azteca. Compartir lo que le apasiona termina siendo un regalo para él y no precisamente para sus alumnos. “Volvería a participar en este programa con los ojos cerrados. Es una institución a nivel mundial aunque tiene su propio formato en cada país”.
Pero a Fernando le gusta seguir explorando su propio camino de la manera más humilde para seguir escalando y superando sus propias expectativas. “No por haberle cocinado a la reina soy inalcanzable. Mi esposa, mi mamá, mi suegra, mis cuñadas son tan importantes como su majestad. Entonces si podemos cocinarle a estas personas al igual que le cocinas a la reina, en ese nivel, hay una gran diferencia en tu trabajo”, finalizó.
Y sí, Fernando Stovell parece un hombre imparable con días que parecen tener más de 24 horas pues además de supervisar su restaurante a la distancia, salir a buscar sus ingredientes y tratar de abrir su espacio en México, todavía piensa en dar cursos de cocina, escribir un libro y además, ser hijo, esposo y amigo. ¡Vaya ejemplo para quienes quieren seguir sus pasos! A nosotros nos encantó poder platicar con un personaje que ha puesto el nombre de México muy en alto. ¡No le pierdan la pista!
Te puede interesar: ¡México está dentro del top 10 de los 50 mejores restaurantes del mundo!