Su Majestad:
Durante 66 años en el trono, ha dirigido la monarquía a través de décadas de cambio social, mientras sigue siendo un símbolo de estabilidad nacional en un mundo que cambia continuamente y que en estos días va muy deprisa. En todos los países, hay personas que han tenido una importancia en su período de tiempo, pero usted definió toda una era. Siempre he querido saber cuándo con 25 años y la mano sobre la biblia pronuncio “Las cosas que he prometido aquí antes, las cumpliré y las guardaré. Así que ayúdame, Dios.”
Una promesa que la llevado a ejercer su deber de una manera admirable, un deber con el que no nació, un deber que adquirió con diez años cuando su tío renuncio a la corona y cambio el rumbo de la historia pero principalmente, cambio el rumbo de su vida, se convirtió en la heredera. Y constantemente me maravillo de cómo fue una mujer que rompió con estereotipos, primero convirtiéndose en cabeza de estado, pero sobre todo asumiendo con profesionalidad la transformación y la evolución de un país.
Continúa muy a gusto en el trono, y no parece tener intención alguna de abdicar. Su reinado, de más de seis décadas, el reinado más largo que se haya visto, convirtiéndola en la mujer más poderosa y famosa del mundo. Y yo ahora la veo en fotografías y se ve tan pequeñita y dulce, y se me olvida que no ha descansado, que se ha enfrentado al parlamento, que ha viajado por el mundo, que ha vivido bajo la lente de la prensa que en muchas ocasiones ha afrontado la crítica y los escándalos, y ha sabido salir victoriosa y bien peinada.
Esa dignidad, junto con el estricto protocolo y su discreción son la base de todo, estoy segura que son los tres ingredientes que nos permiten hasta hoy verla de pie, viendo como la vida ha ido transcurriendo en una montaña rusa de cambios y de eventos históricos de los que no solo ha sido testigo sino también protagonista. “Toda mi vida, sea larga o corta, estaré dedicada a su servicio”, fue el mensaje dirigido al pueblo inglés transmitió por radio cuando cumplió 21 años, y lo ha cumplido.
A mí en lo personal me sorprende no solo que a los 92 años continúe activa y se involucre con esta nueva generación encabezada por sus nietos, para es un modelo a seguir porque a pesar del miedo y la incertidumbre se impuso ante las mentes más conservadoras de su país y con firme convicción se ganó el respeto, el lugar lo tenía desde que su padre se convirtió en rey, pero el respeto, en una profesión donde no era común ver una mujer. Joven se impuso y supo conservar sus principios hasta el día de hoy. Llámenme feminista pero usted vino a explorar un mundo masculino y salió vencedora, siendo hasta la monarca más poderosa de la actualidad.
La admiro, por sacar a flote el barco, por mantener la corona bien puesta, desde antes incluso de ascender al trono. Firme en sus convicciones, lo que se propuso lo consiguió ¿Quién con 13 años decide que el muchacho de 18 que acaba de conocer será el padre de sus hijos y no se detendrá hasta conseguir la aprobación del mundo entero? Usted, obviamente. Usted que se enamoró Felipe y no desistió y casi 72 años después continua a lado de su príncipe azul. Ha dedicado su vida entera al servicio de Inglaterra y aun así historiadores dicen que es prematuro evaluar su legado, pero que mejor legado que haber sido una mujer que rompió estereotipos y cambio las reglas del juego, que continúa cosechando records y que no dejara de sorprendernos, Su Majestad, quizás este periodo Isabelino no contó con un significado arquitectónico ni con una corriente artística pero no tengo duda que consiguió glorificar su era en un reino que parece no tener fin. ¡Long Live The Queen!
ATTE
Eugenia Garavani
#ElMundoDeRegina