Mis queridos, no cabe duda que Meghan, Kate, William y Harry se han adueñado la atención del mundo royal pues si no tienen unas bodas de ensueño, tienen hijos divinos o simplemente el mejor estilo.
Sin embargo, existen muchas más casas reales alrededor del mundo y no, no estamos hablando de la de Suecia, España o Dinamarca. Nos referimos a la realeza de Japón quienes aunque son bastante low profile, esta semana dieron de qué hablar.
Todo empezó este lunes con la noticia de que Ayako se casó con el plebeyo Kei Moriya en una ceremonia tradicional en el santuario Meiji de Tokio, convirtiéndose en la última integrante mujer de la realeza en abandonar la familia imperial del país.
Con 28 años, la hija del príncipe Takamado, contrajo matrimonio con un empleado de 32 años de la compañía de transporte marítimo Nippon Yusen. Con diferentes kimonos y una ceremonia en el santuario dedicado al espíritu del bisabuelo de la novia, el emperador Meiji, la ex princesa selló su amor y abandonó su título nobiliario.
Aunque pierde todos sus privilegios como princesa, Ayako aún recibirá una compensación monetaria (como consuelo) y bueno, vivirá con el amor de su vida el resto de sus días.
Ustedes qué harían queridos, ¿renunciarían a todo por amor?