En 2021, fans y simpatizantes de Britney Spears lanzaron una campaña llamada #FreeBritney con el fin de que su padre, Jamie Spears, dejara de ser el tutor legal de su hija, quien había estado sometida más de una década a sus ‘malos tratos’. Finalmente y gracias al apoyo de un juez, la intérprete de Toxic, consiguió su libertad el 30 de septiembre de ese mismo año y terminó alejada de su familia.
Tal parece que la pesadilla que vivió la originaria de Misisipi podría repetirse luego de varias alertas de familiares y fans, que según se dice, están preocupados por la salud mental de la cantante.


¿Un nuevo tratamiento para Britney?
De acuerdo al portal TMZ, el esposo de la Princesa del Pop, Sam Asghari, su manager, un intervencionista y varios médicos habrían planeado tratar de convencer a Britney que se internara para recibir tratamiento por dos meses, sin salir de su casa de Los Ángeles.
Por otro lado, una fuente cercana a Spears dijo a Page Six que la intervención estaba programada para el martes 7 de febrero, pero ésta no se llevó a cabo por considerarla “innecesaria”.
“Desafortunadamente, hay mucha histeria en los medios en este momento, pero Britney está bien, y gran parte de esto ha sido exagerado y distorsionado”, sentenció la fuente.
Aunque aseguró el informante que la ex estrella infantil de Disney se reunió con un médico, aunque se desconoce si fue con un terapeuta, y sólo dijo que le había ido ‘bien’.


La reacción de Britney hacia la ‘intensidad’ de sus fans
Hace un par de semanas, la cantante de Stronger tuvo que poner un alto a sus fans, ya que éstos se preocuparon porque la artistas, de 41 años, había cerrado su cuenta de Instagram. Por lo que llamaron a la policía para que fuera a inspeccionar a la mansión de Spears.
Sin embargo, la policía confirmó que Britney no estaba en ningún tipo de peligro. “Realmente no hablamos de ningún tipo de problema de salud mental ni nada por el estilo”, dijo la autoridad de Los Ángeles al portal Page Six.


Luego de estas acusaciones, la cantante de pop abrió nuevamente sus redes para hacer un llamado a sus fans y pedirles que pararan, pues habían “llegado demasiado lejos” al llamar a la policía. En cuanto a lo publicado, sobre su posible intervención médica, Britney fue muy clara.
“Me enferma el estómago que incluso sea legal que la gente invente historias de que casi muero”, se refirió Spears a la publicación de TMZ de que si continuaba así “moriría”.
Y continúo diciendo que no le sorprende que se inventen cosas de ella. “La tutela terminó hace un año. No amigos, no es 2007, es 2023 y estoy haciendo mi primera lasaña casera en ¡casa! ¡Finalmente conseguí que la chimenea funcionara en mi sala de estar! “Mi esposo lo dice mejor: ‘¡no creas todo lo que lees! Todo ese amor de vuelta hacia ti’”.
Y es que ahora que es libre, sin nadie que controle su vida o sus finanzas, Britney Spears puede darse el lujo de tener un poco de privacidad y hacer cosas que antes no pudo disfrutar. Ustedes, ¿qué opinan?