Hoy en día, la Basílica de Guadalupe representa uno de los principales recintos de la religión católica en México desde finales del siglo XVI. Es el segundo recinto religioso más visitado a nivel mundial, después de la Basílica de San Pedro, en la Ciudad del Vaticano.
Este 12 de diciembre, como cada año, los católicos celebran a la Virgen de Guadalupe, mejor conocida como la “Madre de los Mexicanos”. Por dicha razón, los peregrinos de distintas partes de la República Mexicana caminan sin descanso hasta llegar a la Basílica con el fin de visitar a la Virgen y cumplir sus promesas.



Orígenes de la Basílica de Guadalupe
Este recinto se construyó en el siglo XVI en diciembre de 1531. Según la religión católica, la Virgen de Guadalupe se apareció en cinco ocasiones en el Cerro del Tepeyac, lugar hasta donde acudió el indígena Juan Diego y ahí, ella le manifestó su deseo de que allí se le construyera su templo. Pero no fue hasta el 25 de marzo de 1695 cuando se empezó la construcción de la Antigua Basílica de Guadalupe y se terminó en abril de 1709. Más tarde, a principios del siglo XIX, su estilo barroco desapareció en su mayoría y fue reemplazado por el neoclásico. Además, se agregó un altar diseñado por José Agustín Paz y Manuel Tolsá.
Nueva Basílica de Guadalupe
El 12 de octubre de 1976 se consagró la también llamada Villa de Guadalupe con el fin de recibir a más feligreses que visitan el templo a lo largo del año. Y es que tan solo el 12 de diciembre, la Basílica de Guadalupe recibe más de tres millones de personas. Es por eso que se dice que la basílica se construyó sobre una base circular de 100 metros de diámetro que permite a los peregrinos una vista completa de nuestra Señora de Guadalupe. Cabe mencionar que en el exterior, se encuentra el ayate de Juan Diego.



Su popularidad y facilidad de acceso para la gente se construyó en su totalidad en julio de 1857. Esto gracias al presidente Ignacio Comonfort que inauguró el ferrocarril a la Villa de Guadalupe. Desde entonces, los viajeros podían acceder con mayor facilidad al santuario. En 1864 se se llevó a cabo la primera peregrinación cuando Maximiliano y Carlota decidieron que su primera recepción oficial fuera su visita a la Basílica, donde caminaron por la calzada de Guadalupe y mostraron su respeto por la Virgen.
A partir de entonces, cada año acuden millones de peregrinos a la Basílica de Guadalupe con la finalidad de conmemorar un año más de las apariciones de la Virgen de Guadalupe. Entre los asistentes hay personas que cumplen sus demandas, que hacen su recorrido a pie, en bicicleta desde sus lugares de origen o bien, comienzan sus recorridos sobre la Calzada de Guadalupe.
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