Travis Barker, el nuevo esposo de Kourtney Kardashian, abrió las puertas de su casa y compartió cómo es tener una vida de rockstar. El baterista de Blink-182 recibió las cámaras de Architectural Digest en su residencia en Calabasas, California.
Barker es dueño de esta propiedad desde hace 15 años y, gracias a la sugerencia de su suegra Kris Jenner, decidió remodelarla con la ayuda del diseñador de interiores favorito de las celebridades, Waldo Fernandez. “Amé la simplicidad y la calidad zen de su trabajo”, dijo a la revista Architectural Digest dirigiéndose al momento en el que conoció a Waldo. “Conectamos de inmediato”.
El diseñador dijo que Travis quería una casa en la que “se pudiera sentir en paz consigo mismo”
Luego de que Barker dejara todo en las manos de Waldo, el diseñador de origen cubano usó un esquema de tonos neutros y agregó “tapicería cubierta de lino realizada a la medida, cálidas piezas de acento de madera con mucha pátina y muebles personalizados inspirados en los clásicos de mediados de siglo”.
Él recién casado soñaba con un espacio donde sus hijos Alabama, de 16 años, Atiana de la Hoya, de 23 años, y Landon, de 18 años, y los hijos de su esposa: Mason, de 12 años, Penelope, de 9 años, y Reign Disick, de 7 años, también estuvieran felices. “He tenido casas con muchos carros llamativos, murales y bicicletas colgando del techo”, dijo el músico.
“Pero con mis tres hijos, además de los de Kourtney, este lugar se sintió como el mejor para este momento de mi vida. Quería una casa en la que pudiera descansar y disfrutar de mi familia, un lugar en el que podamos crear recuerdos”. Kourtney y Travis se casaron legalmente en el juzgado a solo un mes después de celebrar una ceremonia de boda privada en Las Vegas sin una licencia de matrimonio. La pareja que se comprometió en octubre de 2021, intercambió votos en Santa Bárbara.
Esperemos que sean muy felices en su nueva casa.
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