Britney Spears y su todavía esposo Sam Asghari tienen en ‘alerta’ a la prensa mundial, tras la sorpresiva noticias de que él ya pidió el divorcio después de 14 meses juntos. Sobre todo, porque su separación ocurre en medio de rumores de infidelidad por parte de la cantante.
Sin embargo, la prensa ha caído en especulaciones sobre su relación, el peligro que puede correr la fortuna de Britney y las amenazas de Sam por ‘revelar’ información sobre su ahora ex si no recibe lo que le corresponde.


Sam Asghari, el primero en pedir el divorcio
Fue Asghari quien dio el primer paso en esta separación, mientras que a Britney parece ‘no importarle’ la situación, ya que en sus redes sociales compartió que pronto se compraría un caballo. ¿Acaso fue una indirecta o un comentario para distraer el caos que la noticia provocó entre sus seguidores?
Por lo pronto, se sabe que Britney ya contrató a la abogada Laura Wasser, experta en divorcios de celebridades, pues es la misma que han contratado Kim Kardashian, Kevin Costner y Johnny Depp antes.
Pero de acuerdo a distintos medios, el matrimonio de Britney y Sam iba directo al fracaso y la separación de Spears y Asghari era cuestión de tiempo. La revista People consultó a varias fuentes cercanas a ellos que aseguran que la expareja llevaba tiempo tratando de salvar su relación.
“Todo ha sido muy tóxico entre ellos desde hace tiempo”, afirmó una fuente. “Su matrimonio apenas sobrevivía. Es triste pero estaba lleno de drama constante y peleas. Un divorcio sería devastador para Britney“. El sitio TMZ fue el primero en confirmar que la separación del modelo, de 29 años, y la cantante, de 41, era una realidad.
Britney Spears y Sam Asghari: ¿un matrimonio destinado al fracaso?
A principios de este año surgieron rumores de que la pareja tenía problemas maritales. Eso luego de que ambos fueron captados sin su anillo de boda. En marzo, el representante de Sam Asghari señaló que se lo había quitado porque estaba filmando una película. Por su parte, Britney Spears estaba ‘acostumbrada’ a quitárselo solo porque sí, sin que en realidad hubiera una razón de peso.
Spears y Asghari comenzaron su relación en 2016, luego de conocerse durante la filmación del vieo Slumber Party de Britney. En septiembre de 2021, Sam le pidió matrimonio y se casaron el 9 de junio de 2022 en Los Ángeles rodeados de celebridades como Madonna, Drew Barrymore, Selena Gomez y Paris Hilton, entre muchos más.


Sam Asghari se convirtió en un pilar fundamental para Britney Spears durante la intensa batalla contra la tutela de su padre Jamie Spears. La cancelación de dicha tutela duró meses de peleas legales que provocaron una desestabilidad en Britney. Sin embargo, Sam se mantuvo firme al lado de su esposa y la ayudó en todo lo que estuvo en sus manos.
Lamentablemente, ahora esta separación oficial llega de la mano de una solicitud de divorcio y, además, se da en medio de rumores de infidelidad, algo que podría provocar ruido innecesario en la salud mental de Britney Spears. Y es que tal parece que Sam Asghari no piensa ‘hacerlo fácil’ si no obtiene lo que le corresponde.
¿Cuál es la amenaza de Sam Asghari a Britney Spears?
La información proporcionada por distintos medios de comunicación, en particular Page Six, advierte que Sam Asghari amenaza con ‘revelar información sobre Britney, a menos que le paguen lo que pide’. Una fuente agregó que Sam ‘está enfocado en ello’, aunque se desconoce la cantidad exacta que solicita. Sin embargo, para eso se haría efectivo el contrato prenupcial.
Según Daily Mail, en los documentos judiciales que Sam ingresó está pidiendo a Britney una multimillonaria manutención y cubrir los honorarios de sus abogados. Habría que ver si eso concuerda con el prenup, porque se sabe es un acuerdo ‘revestido de hierro’ que protege totalmente los bienes prematrimoniales de la cantante.


Fue justo antes de su boda, en junio de 2022, cuando ambos firmaron el contrato prenupcial que, de alguna manera, beneficia mucho más a la intérprete que al actor y modelo. Una de las cláusulas asegura que todo lo que Britney reunió antes de su boda le pertenece solo a ella.
De hecho, fue Matthew Rosengart, el mismo abogado que la ayudó con la liberación de la tutela de su padre, quien la orientó y arregló el contrato prenupcial a petición de la intérprete. Incluso se aseguró de que Jamie Spears, su padre, no impidiera los términos del mismo acuerdo. En ese momento, el patrimonio neto de Britney Spears era de 70 millones de dólares, aunque de ahí tuvo que pagar los honorarios legales por la liberación de su tutela y la manutención de sus hijos Sean Preston, de 17 años, y Jayden, de 16.


El sitio TMZ asegura que es cuestión de tiempo para que Sam Asghari logre el divorcio de manera legal, luego de la supuesta infidelidad de Britney. Sin embargo, la información que sale desde que se hizo pública su separación podría señalar que hay algo más ‘escabroso’ en su decisión.
Un romántico viaje a Los Cabos, ¿el principio de una separación?
Hace apenas unas semanas, Britney y Sam viajaron a Los Cabos, en donde todo parecía miel sobre hojuelas. Al menos así lucían durante un paseo en yate en junio pasado.
Sin embargo, ayer el modelo señaló que la separación de Britney fue por ‘diferencias irreconciliables’ y apuntó el 28 de julio de 2023 como la fecha oficial del final de su relación.
Ese viaje a las playas mexicanas habría sido el último de la expareja o al menos, fueron días en los que se dejaron ver muy enamorados después de un año de casados.
Sin duda, este episodio llega de la mano de una profunda preocupación por la salud mental de Britney Spears, a quien esta situación podría afectarle de manera irreversible. Ha sido tanto por lo que ella ha pasado que ahora se encontraría ‘sola’ luchando contra el final de su matrimonio. ¿Acaso será el momento de una reconciliación real con su familia?