Por Rodolfo Julian
San Sebastián es sin duda una de las ciudades mas bellas de España. Su entorno natural, montañas, parques, jardines, playas, su arquitectura de la “belle epoque”, su gastronomía y los eventos culturales, como el “Festival Internacional de Cine”, han sido los elementos que conjugan una experiencia sensorial incomparable.
Subir el Monte Igueldo es la primera recomendación para admirarla y dimensionarla con todo su esplendor. Desde este lugar se puede apreciar la belleza de la Bahía de la Concha. La panorámica es perfecta para contemplar un atardecer que quita el aliento y llena la vista de colores únicos.
Peine del Viento es una obra de Eduardo Chillida, situada en un extremo de la Playa de Ondarreta, que ofrece otra magnífica panorámica hacia del interminable mar Cantábrico. Esta obra esta integrada por tres esculturas de acero incrustadas en las rocas. Lo ideal de caminar toda la Bahía de la Concha que tomará media hora hasta llegar a este lugar. Se puede hacer una parada para para disfrutar de unos pintxos, una de las tradiciones gastronómicas vascas más arraigadas en la ciudad.
Un medio día dedicado a la arquitectura lo considero obligado, una iglesia del siglo XVI de estilo gótico, una Basílica barroca del siglo XVIII, edificios de la Belle Époque, palacios, edificios racionalistas, obras contemporáneas.
El Mercado de la Brexta es otro de los lugares mas emblemáticos. Es aquí donde se encuentran los pescados más frescos, las carnes de mejor calidad, vegetales y frutas cultivadas en la región con los mas altos estándares de calidad. Simplemente perderse entre los puestos y admirar lo que sucede aquí es parte de vivirlo y de tener una perspectiva mas exacta de el tipo ciudad que es San Sebastián.
La gastronomía en esta ciudad es el factor mas importante y de peso para quienes la visitan. Son las dieciséis Estrellas Michelin en un radio de 25 kilómetros que la convierten en la segunda más galardonada sólo por detrás de Kioto. Tres de los siete españoles galardonados con tres estrellas, Arzak, Martin Berasategui y Akelarre son sin duda una de experiencias gastronómicas obligadas. Este ultimo fue nuestra opción. Es muy importante hacer las reservaciones con tiempo (algunas tienen ya bloqueadas las fechas por meses).
Nuestro interés por experimentar y profundizar sobre la nueva cocina vasca, nos hizo tomar toda la precaución y lograr una reservación en uno de lo mejores restaurantes del mundo en donde su chef Pedro Subijana es de los principales representantes de esta cocina, de su innovación e internacionalización teniendo muy en cuenta el máximo cuidado de no perder la esencia.
Es un menú de tiempos en donde cada platillo tiene el sello particular del chef y cada uno de los ingredientes están estrictamente cuidados y colocados. Una combinación de sabores que no podría describir por temor a no lograr ser lo suficientemente preciso. Es la experiencia mas importante del viaje. Aquí culmina todo. Es una verdadera explosión sensorial. Sorprende absolutamente la creatividad y evolución en cada uno de los detalles.
Aquí mismo mi recomendación de hospedaje en el Hotel Aquelarre, del mismo dueño. Un proyecto del estudio de arquitectura Mecanismo dirigido por Marta Urtasun y Pedro Rica.
Esta pensado en complementar la experiencia gastronómica y recreativa. Son solo veintidós habitaciones y una zona de spa y wellness.
Cada detalle, aroma, colores, texturas, sabores hacen de la estancia una completa experiencia vasca que le da al viaje un tono de autenticidad y confort que no tienen igual. Simplemente despertar y ver la vista privilegiada del Golfo de Vizcaya hace que valga la pena. Tomar una copa en la terraza y ver el atardecer es de los regalos mas significativos de este viaje. Es imperdonable no visitar la cava de vinos y pedir una breve explicación tanto del lugar como de la colección.
Obviamente el servicio de bruch, cena y snacks del hotel son también de la misma cocina del chef Subijana.
Este viaje nos ofreció poder disfrutar una cara muy particular de España donde la gastronomía es el eje principal.
#reginatelocuentamejor