El Reiki es una práctica sanadora cada vez más popular, pues permite lograr la armonía de la energía que fluye dentro de nuestro cuerpo. Además, su filosofía ayuda a vivir una vida más equilibrada y positiva. Panterita, guía espiritual, explica cómo podemos aplicar los conceptos más importantes del Reiki en nuestra vida.
Lo cierto es que la práctica del Reiki produce diversos efectos si se es constante. En un principio produce relajación, posteriormente descanso, después conduce la energía hacia donde se necesita y, finalmente, se puede llegar a un estado de paz, plenitud y sanación.
¿De dónde surge el Reiki?
El Reiki se basa en los conocimientos hinduistas sobre los chakras -los escritos encontrados en sánscrito (lengua antigua de la India) se remontan a 2,500 años-, los cuales se refieren al estados de salud de los seres humanos. Cuando varios chakras están funcionando mal o están bloqueados, se agrava el estado de salud. Esto produce enfermedades y trastornos, por eso se tiene que dirigir la energía a fin de desbloquearlos y potenciar el proceso de recuperación.
Fue en el Tíbet donde, hace 18 siglos, nació este método curativo que luego fue redescubierto por el monje japonés Mikao Usui en 1920, basándose en técnicas budistas tibetanas milenarias. Rei significa universal y ki energía, por lo que la traducción de Reiki es “energía universal”.
¿Quién puede practicarlo?
“Todos tenemos la capacidad de aprender Reiki. Esto se debe a que la energía con la que se trabaja proviene de nosotros mismos y de las energías de luz que están a nuestro alrededor, al alcance de todos.
El Reiki es el camino personal hacia la sanción, la cual se consigue al aprender a dirigir nuestra propia energía hacia la zona de nuestro cuerpo que está bloqueada, por medio de técnicas y ejercicios apropiados.
Cuando se logra la maestría de esta energía, se puede comenzar a curar a los demás”, explica Panterita.



¿Cómo funciona el Reiki?
A fin de transmitir la energía Universal, que es canalizada por un terapeuta, ésta puede ser directamente aplicada sobre el área afectada o adolorida, o sobre el chakra que rige dicha parte. El Reiki contempla la salud como algo integral que involucra cuerpo, emociones, mente y espíritu, por lo que puede considerarse como una terapia holística.
La meditación es una de las maneras en las que se puede comenzar a poner en práctica por uno mismo. Para realizarla hay que tener control de la respiración, localizar los focos centrales de energía y usar la imaginación para dirigirla con la ayuda del poder mental.
“Si quieres comenzar a sentir la conexión con el Universo para aprovechar toda su energía de amor para sanar y atraer abundancia a tu vida, entonces te recomiendo que comiences practicando la meditación, ya que a través de ella aprenderás a controlar la respiración y a entrar en niveles profundos de relajación y concentración.
Cuando sientas esta profunda paz, puedes visualizar como comienza a rodearte energía azul que desciende desde el cielo hacia ti, ya que, aunque la energía Universal está en todos lados, es una de las formas más sencillas para comenzar a visualizarla, sobre todo si eres creyente, e imaginas a tus ángeles enviando esta energía de amor que te sana completamente de cualquier malestar. También puedes acudir con un terapeuta certificado para sentir sus beneficios de forma más intensa”.
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Objetivo: lograr el equilibrio
También se puede lograr la canalización energética por medio del equilibrio de los chakras, lo cual es posible aprender en el curso Limpieza y Equilibrio de tus 7 Chakras, ya que éstos y el Reiki se encuentran íntimamente relacionados, al tratarse de energía.
Para emplear esta energía adecuadamente para fines de curación, se deben aprender algunos símbolos y posturas de manos que ayudan a canalizar la energía hacia nosotros mismos o hacia las personas que queramos curar.
Sin embargo, la filosofía del Reiki es algo que podemos aplicar desde ya en nuestras vidas. Exige que vivamos el momento presente, que aprendamos a escuchar a nuestro cuerpo y a nuestro Ser Superior a fin de vivir en paz y en equilibrio para prevenir cualquier enfermedad. La causa fundamental de las enfermedades es precisamente la pérdida de esa paz.



Debido a esto, el Reiki es una herramienta muy valiosa para conocernos, saber qué pasa con nuestras emociones y cómo podemos convivir de forma armónica con ellas para no perder la salud.
“Esta filosofía requiere de un entrenamiento diario, pero puede ayudarte con creces a ver el mundo desde otra perspectiva más amorosa. A mediano y largo plazo te ayudará a sanar relaciones familiares, laborales, y a olvidarte de la ansiedad, migrañas, dolores de cabeza, mareos y muchos otros padecimientos físicos y emocionales”, asegura Panterita.
Recomendaciones para practicar Reiki
“Se recomienda practicar el Reiki en un lugar tranquilo, con música relajante e incienso, de ser posible. Sin embargo, los aspectos más importantes son el silencio interior y un estado meditativo profundo.
Las prácticas pueden tener una duración de 30 minutos, pero se puede comenzar con menos tiempo si eres principiante. El objetivo es alcanzar la paz y conectar con la energía universal, aunque sea por un breve periodo de tiempo. Conforme avancemos podremos alargarlo más fácilmente”, aconseja Panterita.
De acuerdo con la filosofía del Reiki, algunas palabras, o mantras, ayudan a sanar espiritualmente, como la frase: “Solo por hoy, no te enfades, no te preocupes, da gracias, trabaja honestamente, sé amable”.



Los beneficios del Reiki
Limpieza y desbloqueo de chakras
Esta técnica de curación ayuda a eliminar energías negativas que el paciente pudiera tener en los centros energéticos más importantes de su cuerpo, lo cual ayuda a desarrollar mayor apertura espiritual, equilibrio interior, incluso a despertar dones espirituales. Es posible aprender más sobre el tema en el curso Limpieza y equilibrio de tus 7 chakras.
Combate el estrés y la ansiedad
El Reiki, al aportar relajación y bienestar con el poder de la energía Universal, ayuda a combatir y controlar el estrés y la ansiedad, así como los efectos dañinos que estos padecimientos tienen en el cuerpo.
Ayuda a sanar heridas emocionales
El Reiki conlleva además principios básicos de pensamiento que invitan tanto a sus practicantes como a las personas que se benefician de él, a fluir, soltar el control, soltar los apegos y cambiar desde dentro para llevar una vida más feliz. Por lo que la terapia energética sumada a esta filosofía, llevan al paciente a sanar diversas heridas emocionales, nuevas o sufridas por años, las cuales pueden incluso causar enfermedades.



Mejora la concentración
La calma y paz interior del Reiki, sumado al manejo de la respiración y la conexión energética con la Fuente, ayudan a mejorar la capacidad de concentración de forma significativa, ya que se elimina el ruido interno y se pone “la casa en orden”, como suele decirse para referirse a la mente.
Ayuda a elevar el nivel de conciencia
El Reiki nos ayuda a reflexionar, a mirar hacia adentro, a cuestionarnos muchos de nuestros patrones y hábitos dañinos de vida, así como fomenta la idea de nuestra conexión con los demás y el Universo. Reflexiones que llevan al practicante y al paciente asiduo a elevar progresivamente su nivel de conciencia.
Aunque no es una fórmula mágica, aclara Panterita, ya que el interesado tendrá que pasar por sus propios procesos de reconocimiento interior, pero sin duda, el proceso es potenciado por el Reiki y el estilo de vida saludable que fomenta.



“Recuerda que todos tenemos cuatro cuerpos fundamentales: nuestro cuerpo, nuestras emociones, nuestra mente y nuestra energía, todos ellos están entrelazados y tienen suma importancia, es por eso que tenemos que cuidarlos. Cuando usamos herramientas como el Reiki, buscamos el equilibrio de nuestro cuerpo energético para afectar positivamente al resto de los cuerpos, a fin de encontrar un balance en nuestra vida. ¡Mucha salud y besos de colores!”, finalizó Panterita.