Por:AnaGloria Valenzuela Monforte
He ido a varios campamentos en mi vida… Entre ellos el de artes teatrales, el de tenis (en el que fallé miserablemente) y el Bikini Bootcamp, en el que peleaba con el sol a ver quien se levantaba primero… Eran 6 am y ya estábamos en la playa corriendo. Pero nada tan inmediatamente satisfactorio como al que sometí a mi piel hace poco: Skin Camp.
Se trata de un pequeño paraíso de color rosa en Los Ángeles, California, pensado para las que queremos darle una mejor apariencia a nuestra piel sin pasar por agujas. Todos los tratamientos incluyen su masaje facial insignia que reafirma y levanta el contorno de la cara por medio de ligeros golpecitos alrededor del rostro de manera constante y rápida.
El menú incluye “ejercicios faciales” que duran de 15 a 45 minutos con la opción de agregar “boosters” para complementar tu entrenamiento.
Mi obsesión por una piel luminosa me llevó a escoger“Glow”, que prometía darle brillo a mi piel y como extra elegí una terapia con oxígeno que nutriría y le otorgaría una hidratación profunda a mi piel. El lugar es casual pero íntimo… para recibir el facial no entras en cabinas como en otros spas. Al llegar te invitan a disfrutar del tratamiento en sillas en tono rosa pastel que se reclinan, mismas que me gustaría que estuvieran a la venta como los rodillos faciales y los Gua Sha.
La rutina empieza con aromaterapia, y así en estado zen, la cosmetóloga inició con una limpieza profundade la mano de un jabón de melón y cúrcuma dotado con Vitamina B12 y E para hidratar, calmar y aclarar la piel…el aroma que expedía el producto de Body Deli, firma de Palm Springs, fue suficiente para hacerme adicta a este limpiador.
Después de retirar el producto con una toalla húmeda y de temperatura agradable, continuó con un exfoliador enzimáticoque desprende delicadamente las células muertas en la cara de las nuevas sin causar irritación. Al aplicarme este producto sentí un ligero cosquilleo, algo que me advirtió la cosmetóloga, aún así, se aseguraba constantemente de que nada extraordinario pasara.
La siguiente fase fue mi favorita: masajeó mi cara con ventosas faciales para estimular la circulación sanguínea y oxígeno. Es aquí cuando utilizan todas las herramientas para esculpir el contorno del rostro y reafirmar.
Antes del último esfuerzo me colocó una mascarilla hidratante que selló con microcorriente.
Al finalizar ese bloque pasó a la terapia de oxígeno, muchos dudan de la veracidad de los efectos que promete, como elaboración de colágeno, pero lo que es cierto, es que se siente súper refrescante.
Conscientes de la importancia del protector solar, sus efectos antiedad y salud, el punto final lo dió al colocarme unprotector solar que, además de cuidarnos, ¡también actúa como producto antiedad!
Y como en todos los campamentos, la despedida fue agridulce… feliz de salir de ahí radiante, pero triste de despedirme de un lugar que disfruté tanto. Sin duda habrá una próxima visita… ¿Será que elijo el facial de CBD para ver de qué trata el alboroto alrededor de estos productos? Lo descubriremos juntos en una próxima entrada.
Dirección: 8240 Beverly Blvd., Los Ángeles
Precio: $40-120 USD. Cada tratamiento adicional es extra. Existen membresías.
Menú: http://www.skincamp.co/
#reginatelocuentamejor